Antiespectáculo
Lo que
engaña y vende de esta película es el
elenco: Sean Penn como jefe mafioso, Josh Brolin y Ryan Gosling como
los duros protagonistas, Emma Stone como la femme
fatale (esas eran las de antes) y Nick
Nolte como jefe de operaciones especiales. Todos intérpretes de buena
presencia y carisma, y gran desenvoltura frente a cámaras. Pero es
lo único que hay aquí, y ni ellos ni el mejor elenco de actores del
mundo podría haber salvado un guión tan lamentable ni una película
así de intrascendente.
Supuestamente
la historia está basada en hechos reales: la avanzada del criminal
exboxeador Mickey Cohen y sus intenciones de hacerse del control
de la ciudad. Cohen echó a la mismísima maffia
de Los Ángeles, pero fue detenido a tiempo ya que la policía se
puso las pilas y armó un pequeño equipo parapolicial con el objeto
de frenarlo a él y sus actividades ilícitas. Pero esta anécdota es
usada para hacer una rutinaria película de género, con héroes muy
machos, diálogos de escolar y muchísima violencia gratuita. La
película sufrió un retraso en su lanzamiento y un cambio en el
guión a último momento: una escena entera tuvo que ser desechada y
debió filmarse otra en su lugar. Una secuencia en plena función
adentro de un cine, con los mafiosos abriendo fuego sobre los
espectadores debió ser omitida como una decisión de la Warner Bros
tras la masacre real ocurrida en Denver.
Si en
El padrino –por
nombrar una película de gángsters en la que existe sutileza para
demostrar ciertas cosas- una cabeza de caballo dentro de la cama era
información suficiente como para saber que la mafia no se andaba con
chiquitas y era gente de temer realmente, aquí lo tenemos a Cohen
vociferando todo el tiempo, y ejerciendo la violencia directamente,
en una misma escena repetida tres veces: alguien cercano a él le
habla mal, o no hace su trabajo como quiere, y él se las cobra
matándolo de formas horribles -taladrándole la cabeza, prendiéndole
fuego adentro de un ascensor, etc- como para demostrar que es
malísimo. A esto hay que agregarle personajes de historieta; el
guionista Will Beal libretó la película por venir La
liga de la justicia, (con Batman,
Superman y tutti quanti)
y seguro se le pegó algo. Los miembros del escuadrón parapolicial
son diferenciados por sus habilidades especiales: el as de la
pistola, el que lanza cuchillos, el experto estratega.
Cuesta
creer que Ruben Fleischer sea el mismo director de la divertidísima
Tierra de zombis,
una película que cumplía con todas los requerimientos para un buen
espectáculo. Lo predecible de la trama, las rutinarias escenas de acción, la ausencia de psicología o interacción humana lógica,
lo ridículo de algunos momentos –mención aparte la contienda
entre el bueno y el malo, en el que el protagonista decide tirar la
pistola y luchar a golpes con su adversario, sabiendo que es un
exboxeador- convierten a esto en la peor de las opciones de la
cartelera actual.
Publicado en Brecha el 1/3/2013
Pues muchas gracias por el aviso, Diego, porque hace poco vi el trailer y pensé que una de gángsters podría estar bien para variar un poco.
ResponderEliminarEl detalle de tirar la pistola y liarse a guantazos suele ser significativo de la pobreza del guión: lo vi hace poco en Jack Reacher (que puedes obviar tranquilamente) y fue como la guinda.
Que no resulta extraño, porque si las películas que se supone deben tener un buen guión no lo tienen, a santo de qué podemos esperar mucho de una película de acción pura y simple.
Mencionar El Padrino, Diego, debería estar prohibido en según qué referencias.... jajajaja....
Un abrazo.