martes, 9 de septiembre de 2008

Las mejores películas (VI)

Lo único bueno que tiene estar en la cama inmóvil con un cuadro de sinusitis y fiebre es que se pueden ver películas y boludear un poco con la computadora. Lo malo, todo lo demás. Pero mejor ni les cuento, acá abajo va alguna de mis adquicisiones recientes, más un sorprendente clásico. Buena merca, si señor.


Offside de Jafar Panahí (Irán)
A pesar del destrato que obtuvo de la crítica, la última película del maestro Panahí es tan grandiosa como sus tres anteriores. Hace poco preguntaba en este blog si a alguno se le ocurría una película reciente que cause gracia, que entretenga, que haga pensar, que emocione y hasta indigne. Offside es una respuesta muy válida. Para que aprendan los que creen que el cine iraní es todo lento y aburrido.

Haze de Shinya Tsukamoto (Japón)
¡¡¡Qué grande Tsukamoto!!! Quién hubiese creído que la mejor película de terror que vería este año sería en realidad un mediometraje, y que además iba a estar filmada por este experimentador enfermo. Mucho sufrimiento y atmósferas asfixiantes esconden una inmensa alegoría. Qué quiere decir todavía no me queda del todo claro, así que si alguien entiende algo, por favor que avise.

Los falsificadores de Stefan Ruzowitzky (Alemania, Austria)
Otra película de judíos en un campo de concentración, pero esta vez centrada en una sección vip (lo que significa que el trato es cruel e inhumano pero no tanto) donde los prisioneros son obligados a fabricar inmensas cantidades de dinero falso para desestabilizar la economía de los países enemigos al Reich, y así financiarle la guerra a la Alemania nazi. Otra gran película histórica alemana.

Ploy de Pen-ek Ratanaruang (Tailandia)
Este Ratanaruang cada día me gusta más. Creo que con Invisible waves ya había dado un gran salto cualitativo, y ahora esta Ploy me parece la mejor de sus películas. El séptimo año de una pareja (¿por qué siempre será el séptimo?) reporta distanciamientos, falta de afecto, desinterés por el otro y sueños donde se corporizan deseos reprimidos, siempre con la magistral estética del director.

El sueño de Casandra de Woody Allen (Estados Unidos, Inglaterra, Francia)
Aunque cueste creerlo Woody Allen se ha volcado al cine negro, en un drama intenso y punzante. Algún crítico detallista encontrará puntos en común de esta película con la obra anterior de Allen, pero la verdad es que a rasgos generales, no parece suya. Nunca fui un fan del hombre, y de hecho deben quedarme por ver unas diez películas de su autoría, pero hay que admitirlo: esto es cine.

Un secreto de Claude Miller (Francia)
Un niño de familia judía nace en la Francia de apenas terminada la segunda guerra. Pero a medida que va creciendo se va dando cuenta que sus padres le ocultan dolorosas circunstancias ocurridas antes de su nacimiento. La película irá develando el secreto del título, y que él mismo es un ser nacido desde un sufrimiento intenso y a partir de la culpa. Otra vez notable Miller.

L’esquive de Abdel Kechiche (Francia)
Adolescentes mayoritariamente musulmanes en un suburbio de París. Jóvenes contenidos y a la defensiva que, a pesar de pelearse permanentemente, insultarse y amenazarse, dejan entrever fragilidad, estima por sus pares y una muy particular forma de relacionarse. Una película increíblemente dirigida y actuada, y que tiene mucho de abordaje sociológico. Imponente.

Inocencia salvaje de Philippe Garrel (Francia, Países bajos)
Un director medio pelotudo quiere filmar, inspirado en la muerte de un amor extinguido, una película que denuncie el infierno del consumo de heroína y de las mafias. Pero el único interesado en financiarla es un traficante de drogas, quien le exige que para ello pase por la frontera buenas cantidades de esa sustancia. Garrel, con un planteo especialmente ácido, planta unas cuantas interrogantes sobre el papel del artista y algunas que otras cosas.

Antes que el diablo sepa que has muerto de Sidney Lumet (Estados Unidos, Inglaterra)
Negrísima historia sobre un robo frustrado, con dolorosas implicancias para los perpetradores. La historia se parece mucho a la de El sueño de Cassandra, también tenemos a un par de hermanos necesitados de dinero que se involucran en el delito y en una tortuosa trama familiar. Obviamente, les sale todo pal orto. Lo mejor de Lumet en décadas.

Rojo amanecer de Jorge Pons (Méjico) 1989
Si será amplia mi ignorancia que no tenía conocimiento de lo que era la masacre de Tlatelolco hasta ver esta gran película. Una obra que en su época tuvo una enorme importancia para la reconstrucción histórica mejicana, y que hoy mantiene inalterada su fuerza y su poder de impacto. Un must, y una película olvidada que merece una urgente reivindicación.

9 comentarios:

adayin dijo...

Boom...
Jajaja, no he visto una sola (no, ni Rojo Amanecer) No estoy enfermo, pero no tardo ni tantito. Voy a tratar de conseguir algunas para mi maraton de incapacidad medica

Juniper Girl dijo...

Totalmente de acuerdo con Ploy, muy recomendada.
Tengo Offside en espera, porque no me gusta mucho el cine iraní pero ahora que dices que no esta dentro de la corriente típica le podría dar una oportunidad.

Saludos.

^^

Manuel Márquez dijo...

Pues a la selección se le podrá reprochar, compa Diego, cualquier cosa, menos que no sea tremendamente ecléctica: un poquito de todo, vaya que sí. La mayoría no las he visto, y apuntadas quedan. De las vistas (Los falsificadores, El sueño de Casandra, Antes que el diablo...), te he de decir que coincidimos en lo sustancial: buenas pelis, sí, señor...

Ah, y que haya mejoría de ese cuadro tan chungo...

Un fuerte abrazo.

Ariel Luque dijo...

De estas películas que haz nombrado he visto hasta ahora, Juegos de amor esquivo(L´esquive) que es una gran película y la segunda es la obra maestra de Garrel Inocencia Salvaje. Inocencia salvaje es una joya por donde la mires - como todo lo que hace Garrel - esa historia oscura, con sus planos inmoviles, su blanco y negro tan clave, su solo de piano que melancoliza de una manera admirable. Garrel es uno de los mejores realizadores del presente. Su tema recurrente - el suicidio - en cada película es tomado desde distintas perpectivas y de distintas maneras. Amo los filmes de Philippe Garrell jaja. Un abrazo.

Ariel.

Diego Faraone dijo...

Shangri-la, estaré leyendo el número, que ya veo que pinta muy bien. Un abrazo y suerte con eso.

Ad, hay que dormir destapado o salir a la calle a hacer nudismo, nunca falla. Pero las consecuencias a veces pueden ser funestas. La verdad que mi cuadro no fue demasiado agradable que digamos.

Juniper, claro que sí, Offside te va a dejar con ganas de más. El cine iraní a vecespuede ser un bodrio, pero también tiene películas enormes. Esta peli es la mejor puerta de entrada a ese mundo.

Manuel, ya estoy curado, gracias por los ánimos. Así que de las tres que viste, las tres te gustaron. Joder, es un muy buen promedio. Ya me había dado cuenta antes de que tenemos gustos muy parecidos.

Ariel, qué bueno dar con un fan de Garrel. Yo sólo vi Les amants reguliers y esta. Ambas me gustaron, pero por ahora me quedo con Inocencia
salvaje. ¿Por cuál me recomendarías seguir?

Gran abrazo para todos.

Ariel Luque dijo...

Si la conseguís, El hijo secreto(1979) sin lugar a duda. Sino seguí con El nacimiento del amor que resulta más facil de conseguir ya que se hizo en el 93´. Pero deberías tratar de ver todas jaja. Son realmente recomendables.

No he visto un cine más personal, honesto y doloroso, que el cine de Philippe Garrel. Su trauma trás la perdida de su amada, y también actrís suya, la cantante Nico - The Velvet Underground y ex mujer de Jim Morrison - lo dejo tan vacío que a partir de alli todos sus filmes se centran en la perdida, la mayoria a causa del suicidio y el abuso de drogas (Nico murio en un accidente en bicicleta, pero estaba totalmente perdida y demacrada por el abuso de drogas). Un cine que carga con dolorosas huellas de la vida de Garrel y por momentos autobiográfico, sobretodo "Inocencia Salvaje". Un abrazo y luego contame cuando las veas.

Ariel.

Diego Faraone dijo...

Ariel, muchas gracias por los datos, ahora no estoy tan perdido. Cuando toque, voy a acercarme al director por el camino que me indicás, muchas gracias. Te mando un abrazo.

Anónimo dijo...

Seguro eres uno de tantos frustrados que cree que escribiendo México con "j" te convertirás, por obra y gracia del racismo en un miembro de la real academia de la lengua española. En lo que rectificas el error y escribes MÉXICO y MEXICANO como se debe, te dejo con un pequeño chiste para que te diviertas:

¿Como se hace un uruguayo? mezcla un poco de español, con un poco de italiano y añádele un poco de MIERDA; pero cuidado, que si te excedes, te sale un ARGENTINO.

Diego Faraone dijo...

Anónimo, tenés razón con lo de Mexico con x y todo eso. Pero no lo cambio porque me gusta que me pidan las cosas con un mínimo de modales, pedazo de un cornudo.